La película escrita y dirigida por Rosalind Ross, narra la vida de Stuart Long, una historia de redención basada en hechos reales. ‘El Milagro Del Padre Stu’ llegará a los cines de nuestro país el próximo 13 de Mayo.
El filme presenta a una familia rota por el dolor que provoca la pérdida de un hijo, en la que quedan una madre sufridora (Jacki Weaver), un padre ausente (Mel Gibson) y otro hijo (Mark Wahlberg), que no deja de luchar por encontrar su misión en la vida.
¿Un boxeador amateur que se convierte en cura?
A priori suena imposible, pero Stuart Long demostró que no y así lo vemos en esta cinta, que nos cuenta un proceso complicado que nos hará valorar si todas las acciones que llevamos a cabo en nuestro día a día, son las más correctas. Todo ello acompañado de una fotografía muy realista y cuidada de las calles de Estados Unidos en las últimas décadas del siglo XX.
La actuación de Wahlberg destaca por su capacidad de interpretar las diferentes actitudes que afrontó el Padre Stu, esto en escasas dos horas de película. Es difícil creerse a un personaje que vive a base de puñetazos y una hora «cinematográfica» después, se pone a llorar desconsoladamente ante una figura religiosa, pero el actor lo consigue. Incluso hace que sientas, que quien está sufriendo es un amigo o un familiar al que te gustaría poder ayudar.
Pero lo más impactante, es el cambio físico que adopta el co-protagonista de Uncharted a lo largo de ‘El Milagro Del Padre Stu’, de esta manera, demuestra la implicación en el proyecto, del que también es productor.
Sinopsis
Cuando una lesión pone fin a su carrera como boxeador amateur, Stuart Long (Mark Wahlberg) se muda a Los Ángeles soñando con ser actor. Mientras se las arregla como puede como empleado de un supermercado, conoce a Carmen (Teresa Ruiz), una maestra de escuela dominical católica que parece inmune a su apariencia de chico malo.
Decidido a conquistarla, el agnóstico de toda la vida comienza a ir a la iglesia para impresionarla. Pero tras sobrevivir a un terrible accidente de motocicleta empieza a plantearse si puede dar una segunda oportunidad a su vida ayudando a otros a encontrar su camino, lo que lo lleva a darse cuenta de que está destinado a ser un sacerdote católico.
A pesar de una devastadora crisis de salud y el escepticismo de los miembros de la Iglesia y de sus padres separados (Mel Gibson y Jacki Weaver), Stu persigue su vocación con coraje y compasión, inspirando no solo a los más cercanos a él, sino a muchos otros con los que se cruza en el camino.
